Usa el ritual para desarrollar intimidad. Comienza tu viaje con un ritual. Esto puede ser algo tan simple como alimentarse unos a otros deliciosamente o compartir una copa de vino desnudo. Algunas parejas disfrutan de bañarse juntas para armonizarse entre sí.
Tómense un tiempo para lavarse unos a otros con amoroso cuidado. El agua relaja el cuerpo y es un símbolo de sexualidad. Masajearse entre sí también es una excelente manera de fusionar sus energías. O lean poesía, bailen, jueguen, escuchen música, trabajen en el desarrollo de nuevas habilidades de intimidad. Lo más importante, usen este tiempo para comunicarse, compartiendo lo que adora uno del otro. La idea es ayudar a que cada pareja se sienta amada y querida.
Para enfocarse completamente el uno en el otro (y no en el objetivo del sexo), algunos amantes experimentan con varios rituales íntimos durante varias semanas antes de pasar a los siguientes pasos o participar en el coito. Esta es una maravillosa manera de fortalecer los lazos del amor y encender la pasión.
La única vez que pensamos en la respiración es cuando tenemos problemas para hacerlo, sin embargo, la respiración consciente puede ser una poderosa ayuda en el crecimiento sexual. Los ejercicios de respiración también calman la mente y te ayudan a enfocarte el uno en el otro.
Prueben este ejercicio: siéntese en silencio, con las piernas cruzadas, uno frente al otro. Descansen las manos sobre las rodillas con las palmas hacia arriba. Mientras miran los ojos del compañero, respiren suave pero profundamente. Mantengan los ojos abiertos, mirando más allá de los ojos, en el alma. Aunque esto puede parecer incómodo al principio, el contacto visual sostenido es esencial para construir la intimidad.
Ahora, presten atención a su respiración. Comiencen a respirar al mismo ritmo, llevando aire lentamente por la nariz y exhalando por la boca. Mantenga el contacto visual mientras respira. Practique este ejercicio hasta que pueda mantener el contacto visual y la respiración armonizada durante aproximadamente 10 minutos. Entonces, puedes pasar al siguiente ejercicio.
Experimenten con un toque erótico para apreciar plenamente a la pareja. Esta práctica más placentera les ayudará a ser mejores amantes. Aunque deben continuar manteniendo el contacto visual, no se preocupen por mantener la respiración sincronizada. La respiración volverá a jugar más tarde. Guíen a su pareja mientras se turnan para estimularse mutuamente. Describan exactamente cómo les gustaría que lo toquen.
Compartan los deseos de una manera alentadora, haciendo peticiones de una manera clara y amorosa. Por ejemplo, pídale a su amante que acaricie su clítoris o pene (o cualquier zona erógena), incitándolo a aplicar más o menos presión, a un trazo en un patrón específico, a usar la lengua, etc. Agradezca con palabras o sonidos y demuestre que está disfrutando de este toque sensual.
Una vez que se sientan cómodo con este proceso, pueden crear un «cofre de placer». Incluyan lo que sea que les excite : una pluma, un vibrador, un aceite para masaje, una venda en los ojos, una tela suave, notas eróticas y cariñosas son solo algunas ideas. Mientras se complacen, no se avergüence de pedir algo diferente. Este es su momento para apreciar, experimentar y asumir la responsabilidad de su propia satisfacción al pedir lo que desea.
Desde aquí, es posible que deseen embarcarse en su propio viaje erótico. Creen aventuras amorosas juntos, explorando nuevas y creativas formas de despertar el cuerpo y la mente de los demás. Entonces, estarán listo para el amor tántrico.